Afirma
que Ipiales y Tulcán, intervinieron de modo masivo en la contienda. “La
sistemática represión contra sus pueblos, dice, se inicia en finales de 1812
hasta culminar en el año de 1814 con unas características que analizaremos a
continuación”:
Las tropas de Lima[1] comandadas por el victorioso Sámano, desde
finales de 1812 (es decir, cuando son derrotados los ejércitos quiteños)
consuman en la subregión una tan minuciosa masacre de pobladores del campo y la
ciudad, de proporciones nunca vistas, que incluso llegó a alarmar a las
autoridades realistas de la localidad y de Pasto. Según la tradición, llevada a
coplas publicadas por Roberto Sarasti Martínez, y cartas del Corregidor Zarama
(partidario de la monarquía) que se lograron salvar del tiempo y de la censura
de entonces, sabemos ahora que no menos
de tres mil personas fueron ejecutadas por las tropas españolas y realistas
en el lapso arriba mencionado.[2]
En
la nota de pie de página el Dr. Oviedo señala: “Ipiales octubre 6 de 1812, Juan
Bautista Zarama, Corregidor realista de los Pastos, informa a Blas de la
Villota sobre los graves sucesos de Quito, Carlosama, Cumbal, Tulcán e Ipiales;
archivo particular (Pasto); Popayán, diciembre 1 de 1812. El Corregidor Zarama
a Blas de la Villota informándole sobre
la muerte de más de mil pobladores, en Tulcán e Ipiales, a manos de la tropa limeña; (guayaquileños, limeños)
idem; archivo. Archivo Nacional del Ecuador, Fondo Popayán, caja 294. Pasto, 3
de abril de 1814, levanta información el Brigadier Juan Sámano sobre los
movimientos insurgentes que se ha suscitado en la Provincia de los Pastos desde
1812.
“Este fue el asesinato colectivo, en la época de la independencia (y de
la república), más grande e inhumano que recuerde la historia de Colombia, dada
su premeditada crueldad y teniendo en cuenta el reducido número de habitantes
de la subregión afectada, más concretamente en Ipiales y Tulcán. Soldados y
mercenarios realistas obraron con premeditación y fases repentinas de terror,
en la liquidación selectiva de dirigentes y adultos de las comunidades
indígenas, de mestizos que fueron delatados y de algunos habitantes urbanos que
no alcanzaron a huir hacia las montañas vecinas.”
“Las características de tales ejecuciones no se conocen en detalle,
pero, según la correspondencia particular que se guarda en el archivo de la
familia Cano-López en Pasto, debieron comenzar con apresamientos masivos, por
sorpresa, el fusilamiento a continuación, más la justificación de que prácticamente
todos los prisioneros eran soldados o auxiliadores de los insurgentes, (lo cual
era cierto) y que, por lo mismo, debían ser ajusticiados según las muy
elásticas reglas de la guerra en dichas épocas”.
“Lo que resalta en estas comunicaciones horrorizadas, a las cuales se ha
tenido acceso por cortesía de la mencionada familia, es que, desde 1814,
prácticamente desde la finalización del terror monarquista en los Pastos
centrales (Tulcán e Ipiales) con el fusilamiento de los hermanos Belalcázar, en
la pared de la ermita de San Joaquín y de Santa Ana en Ipiales, se establecería
una rivalidad y desconfianza sin precedentes entre la región del sur y la
región del norte del actual Nariño…” (fin de la cita).
Benítez
aparece también como Juez en los juicios que se siguieron a esos guerrilleros independentistas
de las actuales Carchi y Nariño en 1815. En 1817, permanece como Jefe Militar en
Tulcán. Finalmente diremos que, pasados 70 años desde la publicación realizada
por Don Carlos Emilio Grijalva, el Dr. Patricio Muñoz Valdivieso, publicó la
genealogía de la familia Carrión y nos descubre que el feroz Crnel. Realista
Juan Benítez, nació en Cuenca en 1767, siendo hijo de los ciudadanos cuencanos
Tadeo Benítez Alvear y María Ignacia Ambrosia de Carrión y Merodio, de las
primeras clases sociales de Cuenca y Loja. Había casado con la señora María
Vicenta Valdivieso y Valdivieso hija del Gral. Pedro Javier de Valdivieso y
Torres y de Da. Isidora de Valdivieso y Román. Como comandante en el Cañar,
deja una documentación extraordinaria para la historia nacional y militar, con
casi 100 partes de guerra desde enero de 1811 hasta mayo de 1812, que hemos
reproducido parcialmente en nuestro libro “Las Guerras”. En todo tiempo, Benítez
aparece en las diversas batallas y destinos del ejército realista. Este
militar, junto con otros oficiales, nos proporciona el hilo conductor de la
historia, personal, social y colectiva de la fuerza realista desde 1809 hasta
1822, demostrándonos que los mismos jefes, oficiales y tropa, formaron el
profesional ejército del Rey en Quito y sur y centro de Nueva Granada.
El
id. id. Dn. Juan Dávila.- Juan Pascual Bailón Dávila de la Chica, bautizado
en Cuenca el 19 de enero de 1786. Hijo del ciudadano de Cuenca Ignacio Domingo
Dávila Astudillo y de Javiera de la Chica y Astudillo (Tello de la Chica). El
señor fue tío abuelo de Luis Antonio Cevallos Dávila, casado con Enriqueta
Gangotena López, que son abuelos del ex presidente Dr. Rodrigo Borja Cevallos.
El id. de Infantería
Dn. Ignacio Arteta.
De
Capitanes Efectivos de Milicias
Dn. José Antonio Illera
Dn.
José Antonio Balcázar.-
Llevó el dinero producto de las donaciones, exportaciones y comercio
guayaquileño en varias oportunidades a estos ejércitos realistas. José Antonio Balcázar Sánchez, nació en Popayán en 1770 y
testó en Quito el 16 de septiembre de 1851 ante Cosme Salazar. Realista,
nombrado corregidor de Ambato en 1820 por el coronel Francisco González luego
del primer Huachi. Hijo de Francisco Antonio Balcázar Mosquera y de María Fermina
Sánchez Lemos. Se casó con la quiteña Petrona Fernández. Su hija María Santos
Balcázar Fernández casó con Ramón Zambrano Bedón, con sucesión en las familias Zambrano
de Quito.
Dn. Joaquín Segura.
Grados
de Capitanes de Milicias
Teniente de Infantería
Dn. Jorge Mariño y Piedra. (Ya mencionado)
Otro Dn. Ventura
Llaguno. (Ya mencionado).
Otro
Dn. Juan Antonio Jáuregui ( y Barrutia).- Nacido en
Castilla La Vieja en 1780. Hijo de Florencio Jáuregui y de Joaquín Barrutia,
castellanos. Capitán de los Ejércitos Reales. Se casó en Cuenca el 27 de mayo
de 1812 con Antonia Juana Nepomucena García de Trelles y Veintimilla. Son el
tronco de la mayoría de familias Jaúreguis de Cuenca y Ambato.
Otro
Dn. Manuel Izquierdo.- Puede
tratarse de un vástago del azuayo Manuel Gabriel Izquierdo del Prado y
Astudillo, nacido en 1754. Hijo de Juan Ignacio Izquierdo del Prado y Avilés y
de Juana Astudillo. Se casó con Marcelina de la Piedra.
Otro
Dn. Juan García Velarde.-
En
1814, se halla en la villa de Pasto y había sido en ese lugar el Jefe de la
Quinta Compañía de Milicias Disciplinadas de Cuenca, habiendo regresado a Quito
el 31 de diciembre de ese año. En 1815 se encuentra
en Quito como Capitán graduado de la cuarta Cía. de Milicias de Infantería de
Cuenca, designado defensor de oficio en el juicio penal seguido contra Vicente
Requejo y otros. Consta en muchos documentos importantes, entre ellos, el parte
de la victoria de Sámano en la Cuchilla de Tambo en 1816: “Hoy despacharé con una partida á Pasto 170 prisioneros, porque se van
sacando muchos de los montes y quedan heridos multitud de ellos, viéndome
precisado a formar un hospital para esta gente, que dejaré á cargo, hasta que
llegue a Popayán, del capitán graduado don Juan
García Velarde; pero retengo los oficiales para que sufran la pena en
Popayán, donde han cometido sus delitos (f. Juan de Sámano).
Otro
de Dragones Dn. Antonio Carrasco.- Antonio
Carrasco Álvarez de Velasco, nacido en Azogues en 1791. Casó con la guarandeña
Mercedes Llaguno Coloma.
Otro
id. Dn. Manuel Rivera.- Puede tratarse de
Manuel Anastacio Rivera Nates (hermano de Baltazar Rivera Nates, que después de
este tiempo, tomó parte en las batallas de Ayacucho y Tarqui a órdenes de Sucre
y quien fuera abuelo de Gonzalo S. Córdova y Rivera), nació en Cuenca en 1794.
Hijo de Juan Luis de Rivera y Benítez (primo del siempre nombrado Juan Benítez
Carrión) y de Francisca Nates y Crespo.
Grados de Tenientes de
Ejército
Teniente de Milicias de
Infantería Dn. Manuel Mora
Otro id. Dn. Manuel
González
Otro id. de Dragones
Dn. Vicente Garzón o Gazcón
Subteniente de
Ejército…….Antonio Peche
Otro
de milicias de Infantería Jerónimo Ricaurte.- Aparece
en la Revista de Comisario de la ciudad de Latacunga en octubre de 1812, y con
grado de teniente el 10 de enero de 1815 en la ciudad de Pasto, en la Plana
Mayor del Ejército Real. Jerónimo
Ricaurte Calisto, nació en Guano en 1788 y murió allí mismo el 21 de febrero de
1874. Hijo del neogranadino Jorge Ricaurte Mauris, citado anteriormente como
teniente coronel de los Reales Ejércitos y de la quiteña Josefa Calisto Muñoz.
Se casó en Pasto durante el tiempo de permanencia de este Ejército en dicha
ciudad, con la linajuda María Mercedes Santacruz y Zambrano, viuda de Manuel
Alonso de Velasco y Moreno.
Otro id. id. Dn. Manuel
Ricaurte
Alférez de id. de
Dragones Dn. José Orellana
Grados
de Tenientes de Milicias
Subteniente
de Id. de infantería Dn. Luciano González.- Luciano González y Ribera, nacido en Buga por 1779.
Llegó a ser teniente del Ejército español en 1817. Hijo de José Ignacio
González y Gómez y de Rosalía Ruiz de Rivera y Guevara. Pasó a Guano, en donde
casó en 1808 con doña Micaela Ricaurte Calisto (hermana del citado Jerónimo). El
Dr. Fernando Jurado cuenta que fue hombre agresivo, que asesinó al señor Miguel
Pástor. Salió de Guano en 1811 para ser administrador de Rentas Unidas de
Latacunga. En 1816 fue corregidor de Latacunga, en 1817 era vecino de Quito. En
1820 volvió a Latacunga como administrador de Rentas. Había llegado a Quito con
su hermano el doctor Luis José González Rivera, abogado graduado en Quito en
1797, que volvió a incorporarse en 1818 y que también fue realista. En 1822, luego
de la Batalla del Pichincha, Sucre le dio pasaporte para que fuera a Lambayeque
con toda su familia. Casó en Quito en 1797 con Josefa Venegas de Córdova y
Olaís. Viudo, ingresó al sacerdocio nuevamente en Quito, en donde murió en
1849.
Alférez de id. de
Dragones Dn. Vicente Mariño
Grados de Subtenientes de Ejército
Sargento
1º. Distinguido Dn. José Berroero Cortés.
Aparece posteriormente en Revista de Comisario el 10 de enero de 1815 en Pasto,
con grado de Subtnte. y sueldo de Sta. Fé.
Otro
id. José de la Vega.-
[3].
Aparece como subteniente con sueldo de Santa Fé de Bogotá el 10 de enero de
1815, en la Revista general de la ciudad de Pasto el mando del Cap. Pedro
Galup. Este militar dispone de una importantísima hoja de vida en la que podemos
establecer que nació en Lima el 10 de septiembre de 1785, siendo hijo natural
de Don Francisco Álvarez de la Vega y de Da. María Noriega. Fue su padrino Dn.
Ignacio Santiago de Ulloa. Entre los muchos documentos que forman el expediente
militar, aparecen los firmados por Joaquín de Molina, Melchor Aymerich, Agustín
Galup, Antonio García de Trelles, Vicente Gascón y Peñaroja, Fernando
Barrantes, Juan Bautista Heredia y muchos otros. Con los informes de estos
oficiales realistas en especial el de Galup, se conoce que de la Vega, salió en
el mes de octubre de 1809 de modo voluntario y como Cabo 1º. En la “División
del Regimiento Real”, que se destinó “a la pacificación de Quito”, habiéndose
mantenido de brigada de toda la expedición y siendo ascendido a sargento 2º. y
regresando a Guayaquil “a donde se replegaron las Divisiones después de la
función del 2 de agosto de 1810”, “en que por descontado se halló”, y que desde
noviembre de 1810 se trasladaron a Cuenca con el fin de organizar, disciplinar
e instruir las tropas “que en dicha ciudad se formaron contra los de Quito…”
En cuanto se dieron inicio a las hostilidades
en enero de 1811, de la Vega participó en el ejército realista y avanzó a Quito
en 1812 y luego a Pasto y Popayán, en 1813, con el grado de subteniente, así
consta en la lista general de Comisario del Ejercito Real el día 10 de enero de
1815, en la ciudad de Pasto en la 3ra. División de Infantería de Lima, como
cuarto al mando después de Pedro Galup, Julián Casaos y Fermín Dávila.[4]
Soldados
distinguidos Dn. Bruno Camacho.- Bruno Camacho y Flores, bautizado en Guaranda. Consta como Ayudante
mayor del Regimiento de Milicias el 18 de mayo de 1818. Se casó en Guayaquil en
1822 con María de Jesús de la Concepción Arbeláez y Morillo, hija de Francisco
Xavier de Arbeláez y Munites, nacido en Baba, y de Rosa de Morillo y Bayas, de
Baba. Su hija Rita se casó con Ignacio Jouvin Díaz, su nieta, Jesús Jouvín, se
casó con Manuel Plaza con gran descendencia en Guayaquil.
Dn.
José Antonio Rubio.- Figura en la Revista de
Comisario el 10 de enero de 1815 en Pasto, con grado de Subtnte.
Dn.
Martín Cabrejas.- Este militar figura como
Subtnte. Graduado en la Revista de Comisario de la ciudad de Pasto el 10 de
enero de 1815, en la Segunda División del regimiento de Infantería de Lima,
hallándose con permiso en la ciudad de Quito. Llegó
desde el Perú como miembro del Real de Lima. En 1812 luchó a favor de los realistas
en San Antonio de Ibarra y fue el que hirió al francés Gullon, por lo que
Sámano lo ascendió de soldado a oficial.
Dn.
Pedro Tola.-
Figura en el pueblo de Calibío por 1814.
También el 10 de enero de 1815 consta su
nombre en la ciudad de Pasto, en calidad de prisionero (seguramente del
ejército de Nariño), en la Revista General del Ejército Real; finalmente como Tcrnel.,
el 25 de mayo de 1822 luego de la Batalla de Pichincha, en calidad de uno de
los lugartenientes del mariscal Melchor Aymerich. Pedro José Rufino de Tola y
Salcedo, nació en Guayaquil el 15 de noviembre de 1792 y fue bautizado en La
Matriz el 19 de ese mes. Testó en Guayaquil el 10 de abril de 1862 ante el
escribano Julián Sánchez. Residía en Santa Fe en 1817 en filas del ejército del
Rey.
Sargento
Julián Crespo.- Debe tratarse de un hijo de Julián Crespo Quinde, bautizado
en San Blas de Cuenca el 5 de septiembre de 1747, hijo a su vez de Alejandro
Crespo y de Esperanza Quinde.
Subteniente de Milicias
Dn. Juan….(No se puede leer el apellido)
Otro
Dn. Antonio Rendón.- Oriundo de Cuenca, casado
en El Sagrario de esa ciudad el 3 de octubre de 1811 con María Josefa
Bustamante.
Otro Dn. Severo Serrano
Otro Dn. José
Fernando Rodríguez.- Fernando Rodríguez Plaza y Coello, bautizado en la
iglesia Matriz de Guayaquil
el 8 de junio de 1778. Casó el 29 de marzo de 1802 con su prima Mercedes
Tufiño. Usaban el apellido Plaza sobre el Rodríguez.
Sargento
1º. Distinguido Dn. Santiago Ita.- Fue oriundo de Lima y vino desde un inicio en el Ejército
Real, permaneció en las fuerzas de ocupación de la ciudad de Quito y estuvo en
la Batalla de Pichincha en 1822, enseguida Sucre le otorgó en Quito pasaporte
el 25 de septiembre, para que regresara a Lima con un criado.
Otro id. id. Dn. Marcos
Monino
Otro id. id. Dn.
Francisco Manferrer.- Oriundo de Lima. Debe ser el
mismo o hijo de Francisco Manferrer y de Isabel Perea, que inscribieron en la
parroquia de San Lázaro de Lima a sus hijos Juan Evangelista (1786), María
Teresa (1789) y María Josefa (1778).
Otro id. Dn. Francisco
Viescas
Otro
id. José Falcón.-
Natural
del Cañar, casado en la parroquia
de San Antonio de Cañar el 27 de junio de 1790 con Nicolasa Guagansela.
Soldado distinguido Dn.
Bernardo Izquierdo.
Otro
Dn. Andrés Santander.- Aparece el 11 de
junio de 1815, en la Revista de Comisario de la Novena Compañía de Dragones de
Cuenca, realizada por el Cap. Juan
Benítez al señor Ramón Narváez, Regidor del Ilustre Cabildo de la provincia de
los Pastos y luego en marzo de 1817, en Tulcán.
Grados de Subtenientes
de Milicias
Soldados
distinguidos Dn. Tomás Espantoso.-
Figura muchos años más tarde como capitán en las Milicias guayaquileñas en 1822,
posiblemente en el Ejército Real, aunque pudiera ser también en el bando
contrario. Se trata de Tomás Luis de Espantoso y
Avellán, nació en Guayaquil en diciembre de 1792 y fue bautizado en iglesia
Matriz el 16 de enero de 1793; falleció en Guayaquil el 16 de julio de 1843.
Capitán de Milicias, nombrado rey de Armas para la jura de la Constitución de
la Monarquía en 1813. Casó en Guayaquil el 27 de marzo de 1821 con Dolores
Luzcando y Bernal, nacida en Guayaquil en abril de 1805 (hija de José María
Luzcando y Murillo, nacido en Panamá, abogado, teniente de gobernador, asesor
general y auditor de Guerra de la provincia de Guayaquil, y de Petra Antonia
Bernal y Larrea, de Guayaquil). Además, tuvo descendencia con María Jacinta
Mora.
Dn.
Francisco Espantoso.-
Este oficial realista, al cabo de las guerras de la Independencia, figura como
Ayudante del Cmdte. Santiago Luco, en 1822. Es el señor Francisco de Espantoso
y Avellán, bautizado en La Matriz de Guayaquil el 25 de agosto de 1796, falleciendo
en esa misma ciudad el 4 de noviembre de 1841. Teniente de Milicias realistas destacado
en Manabí. Casó con María Antonia Tama y Rodríguez Plaza, nacida en 1778.
Dn.
José Prieto.- Quien figura el 3 de enero de 1815,
como subteniente de las Milicias Disciplinadas de Guayaquil, acantonado en
Popayán. Se trata de José Hermenegildo Prieto y Pimentel, nacido en Guayaquil
el 12 de abril de 1793, residía en Lima en 1846. Fue hijo de Francisco Javier
Prieto, quien fuera teniente de Gobernador y justicia mayor del pueblo de Santa
Ana de Samborondón en 1815, 1816 y 1817, y María Dolores de Pimentel y
Sotomayor (o Rodríguez Plaza), nacida en Guayaquil en abril de 1764 y fallecida
en 1833 (quien casara en primeras nupcias con Pablo de Urruchurto y Rodríguez
Plaza).
Dn.
Ignacio Naranjo.- Figura en Calibío por 1814 y
luego al año siguiente, como subteniente y jefe de los Granaderos de Guayaquil
junto a don Vicente Saldaña, en Pasto el 10 de enero de 1815, en la Revista de
Comisario del Ejército Real.
Dn.
Juan Antonio Divisa.- Figura 2 años más tarde, en
Pasto el 10 de enero de 1815 en la Revista de Comisario de la 1ra. División del
Regimiento de Infantería de Lima.[5]
Dn.
José Antonio Campe.- Este ciudadano, glorificó a los
ejércitos realistas en 1814 en el encomio realizado por el Comercio mayor de
Guayaquil a la ciudad y pueblo de Pasto, en su victoria frente al libertador
Gral. Antonio Nariño. Aparece desde un inicio, en la revista de Comisario de la
ciudad de Latacunga de octubre de 1812. Señalamos que a Guayaquil llegó un comerciante
siciliano llamado Nicolás Campe, que era teniente de Milicias. Él murió en
Guayaquil en 1808. Se había casado en 1763 con Ana Coello de Portugal. Tuvieron
ocho hijos; entre ellos José, que había nacido en 1775 en Guayaquil y murió
allí mismo en 1825, es decir, sobrevivió las guerras en Nueva Granada y retornó
al Puerto.[6]
Sgto. 1º. Distinguido
Dn. Juan de la Peña.
Soldado distinguido
Damián Álava.
Cadete…………..
Sgto. 1º. Don Antonio
Cajas.
Soldado distinguido Dn.
José Orellana
Pardos de Infantería
Otro Ignacio Huerta
Sgto. 1º. Fernando
Ramírez
Otro
id. Dn. Ignacio Moncayo.- No habíamos podido
identificar a este oficial guayaquileño en ninguna otra acción de armas o
destino, sin embargo al finalizar este libro, hemos descubierto su presencia
como tercero al mando del Batallón de Dragones de la Reina Isabel, en la ciudad
de Quito en el año 1821, es decir, en vísperas de la Batalla de Pichincha y un
año después del pronunciamiento de Guayaquil de 9 de octubre de 1820. Su
presencia en la citada Batalla en las filas realistas, es indudable como la de
muchos otros oficiales y soldados guayaquileños.
Otro id. Alfonso
Salavarría
Otro id. Xavier Calle
Otro 2º. Antonio
Orellana
Grados
de Sargentos 1os. de Ejército
Sgto. 2do. José María
Villalta
Cabo 1º. Jacinto Rosas
Otro 2º. Laurencio
Benites
Soldado Juan Pineda
Cabo 1º. ….Alejo León
Otro id. Ramón Cárdenas
Otro 2º. Ramón Vidal
Sargento
2º. José Mateo Santistevan.- Figura en Pasto en
la Revista de Comisario el 10 de enero de 1815 como miembro del Real Cuerpo de
Artillería y grado de Sargento 1º. Graduado.
Cabo 1º. Manuel Gonima
Grados
de Sargentos 2º.
Soldado Luis Torres
Otro Manuel Sarmiento
Grados
de Sargentos 1os. de Milicias
Cabo 1º. José Villacís
Otro id. Tadeo
Domínguez
Otro 2º. Juan de Dios
Fajardo
Pardos
Soldados
Narciso
Martel.-
Este clase peruano, que vino el año 1809, es uno de los autores del genocidio
en la ciudad de Quito el 2 de agosto de 1810. Corre lista luego en la ciudad de
Pasto el 10 de enero de 1815, en la Primera Compañía de cazadores de Lima, al
mando del Tcrnl. Francisco Bega ya con grado de Sargento. En 1816, hallándose
en la actual Colombia, antes territorio quiteño, este individuo desertó de la
batalla de la Cuchilla de El Tambo, en que Sámano venció a Carlos Montúfar y
Liborio Mejía, a costa de innumerables bajas del ejército patriota, conformado
por algunos soldados quiteños que habían escapado luego de la derrota de 1812 en
San Antonio de Caranqui y naturalmente muchos caleños, payaneses, bugueños y
bogotanos. Graves sufrimientos y sacrificios tuvieron también en esa y otras
guerras, los realistas. En efecto, Martel consta en la lista de 1816 de soldados
del Rey que escaparon de la Batalla de Tambo y arribaron a la ciudad de Quito, luego
de 3 y 4 meses de peregrinaje, en donde fue reincorporado en octubre de ese
año, al ejército de ocupación de esta ciudad. Al año siguiente, 1817, se
encuentra arrestado por 8 días por faltar a la 2da. Guardia en esta misma ciudad.
Es indudable que participó en la Batalla del Pichincha.
Domingo
Espinoza.
Pardos
de Lima
Teniente José Parreño,
Creado de Capitán de Milicias
Sargento Mateo Paredes,
grado de Subteniente de Milicias
Pardos
de Guayaquil
Teniente José Pacheco,
grado de Capitán de Milicias
Subteniente Sebastián….
grado de Teniente de Milicias
Otro Agustín Celi grado
de idm.
Otro Mariano Arce grado de idm.
Este individuo, desertó de la cuchilla de Tambo el 25 de junio de 1816.
Morenos
de Guayaquil
Sargento 1º. Manuel
Parais, Grado de Subteniente de Milicias
Quito
y mayo 30 de 1813”
CONCLUSIONES.-
Primera.-
Apegados a la verdad de la investigación, la contundencia de los documentos y
la reflexión lógica y ética de los mismos, diremos que los oficiales y soldados
que actuaron desde 1809 y 1810 en los Ejércitos del Rey, en la jurisdicción de
la Real Audiencia y/o Estado de Quito, incluidas naturalmente Cali, Popayán
Pasto e Ipiales, se mantuvieron en su mayoría, con las excepciones producidas
por la muerte e invalidez, en las mismas legiones realistas hasta luego de los
pronunciamientos del 9 de octubre y 3 de noviembre, cuestión que deja muchas
interrogantes.
Segunda.-
El Ejército realista en el territorio de la Presidencia de Quito, se hallaba
dividido en dos grandes porciones: a) El que actuaba en la ciudad de Quito, y; b)
el de Pasto, que avanzó a Popayán y Bogotá. Soldados de este grupo entre otros,
al ser derrotados en Boyacá, se replegaron a Popayán y luego al reducto casi
inexpugnable de Pasto hasta 1822 y aún más tarde[8].
En efecto, los siguientes oficiales que fueron integrantes del Ejército Real
derrotado en Boyacá, participaron bajo las órdenes de Aymerich junto a sus
tropas replegadas también desde Nueva Granada, en el Pichincha: Crnl.
Francisco González, Crnl. Nicolás López de Aparicio, Crnl. Damián de Alba[9], Crnl.
Carlos Tolrá, Crnl. Manuel María Martínez de Aparicio, Tcrnl. Hermenegildo
Mendiguren, y el Tcrnel. Pedro Tola, guayaquileño. Oficiales cuencanos que
hemos podido identificar en la batalla de Boyacá, contra Bolívar son: Juan
Bautista Heredia, Ramón Vélez y José Duarte, soldados en esa misma batalla, son
los granaderos de Cuenca, incluidos en los Granaderos de Santa Fe y también en
algunas escuadras de los batallones de Numancia.
Tercera.-
La documentación presentada abarca la integridad de la existente en los
archivos señalados, sin que exista otra, por ello, afirmamos que no hay legajo,
expediente o fondo que hayamos disimulado o guardado. En tal virtud, sabemos
que no existieron otros contingentes regionales -decisivos- de soldados que los
expresados, en los Ejércitos del Rey en territorio del Ecuador y sur y centro de
la actual Colombia, es decir, en la Real Audiencia y/o Estado de Quito y las
enormes secciones centrales de Nueva Granada que formaban parte de su
territorio. Indudablemente hubieron soldados
de otras regiones y lugares como panameños, patianos, payaneses,[10]
y evidentemente, de varias partes de la misma Nueva Granada en el amplio
territorio del Virreynato, pues muchas poblaciones, sin orden alguno, fueron
realistas en la actual Colombia y contribuyeron en ciertos momentos, en estas
legiones realistas que formaron las tropas de Sámano y los otros jefes que
actuaron, repito en la Real Audiencia de Quito, pero en ningún caso, tuvieron el peso regional específico de las
tropas de las 4 regiones señaladas, que han sido identificadas, no por
nosotros, sino por los Jefes y autoridades de esos ejércitos por el lugar de origen,
reclutamiento, leva, alistamiento e integración, al experimentado Ejército
realista.
Cuarta.-
La pertenencia a la clase social alta de oficiales limeños, cuencanos,
guayaquileños y pastusos, hace que sean plenamente identificables en la
historia, por dejar bienes, testamentos, títulos, y descendencia con recursos y
propiedades, pues el soldado llano, desafortunadamente, miembro de las clases
sociales no favorecidas, no deja otra huella que su nombre en uno o dos
documentos, como el inestimable que hemos analizado con el número 10 de “Documentos
de la Investigación”, intitulado “Ejército Real Reconquistador de las
provincias de Quito” y que hemos analizado.
Así a más de los
extensos ejemplos señalados, tenemos el caso de la firma aparecida en el
documento, signado como No. 15, del señor Martín Santiago de Icaza y Silva, bautizado en la iglesia
Matriz de Guayaquil de un día de nacido el 31 de diciembre de 1782, habiendo testado el 30 de enero de 1837 y
otorgado codicilo el 27 de febrero de ese año, ante el escribano José Luis
Brito, tal como nos relata el investigador señor Mauricio Alvarado Dávila,
quien se ha basado a su vez, en estudios del Dr. Fernando Jurado y otros. Hijo
del panameño Martín de Icaza Caparroso Urigoytia y Vásquez de Gortayre y de la
guayaquileña María Rosa Benita de Silva y Olave. Fue alcalde ordinario de
Guayaquil en 1813, procurador general síndico del Cabildo, propuesto para el
Corregimiento de Loja; secretario de la Presidencia y Comandancia General de
Quito en 1815 en filas realistas; concejal, diputado y secretario de la
Convención de Ocaña, de la República de Colombia en 1828, en el bando
contrario. Diputado al Congreso Admirable de Colombia en 1830 y este mismo año,
a la Convención de Riobamba, en la que se constituyó en Estado del Ecuador;
prefecto del Departamento de Cuenca en 1831, consejero de Estado, presidente
del Concejo Municipal de Guayaquil en 1833. Fue dueño del Sitio Cacharí del
Cerro, de la quinta parte de Champe y de Convento, de una cuarta parte del
Invernadero de Ojiba. Dejó descendencia en María del Carmen Vera, María del
Rosario Pitaluga y María del Rosario Llaguno. Miembro de esta familia realista,
es su hermano Francisco de Paula de Icaza y Silva, casado con Isabel de Paredes
y Olmedo, sobrina carnal de José Joaquín de Olmedo y Maruri. Los señores
Icaza-Paredes son los tatarabuelos de la señora doña Sara Icaza Mora, casada
con el señor Rafael Antonio Correa Jurado, abuelos del Dr. Rafael Vicente
Correa Delgado, Presidente de la República.
Por
lo tanto, con la comprobación histórica y documental que aquí queda
exteriorizada, decimos que los Ejércitos del Rey profesionales y permanentes, que
lucharon en el Estado de Quito y el sur y centro de Nueva Granada, hoy
Repúblicas del Ecuador y Colombia, entre 1809 y 1822, en períodos de paz y en innúmeras
acciones de guerra, dirigidos entre otros, por Montes, Aymerich, Sámano, Asín, Vidaurrázaga
y Barreiro; y finalmente presentaron batalla en Bomboná el 7 de abril de 1822
al mando del Crnel. Basilio García[11]
y en Pichincha el 24 de mayo del mismo año, bajo las órdenes del Mariscal
Melchor de Aymerich y Villajuana, en contra de las tropas libertadoras de Simón
Bolívar y Antonio José de Sucre, estuvo constituido en decisivo porcentaje, de
legiones, compañías, escuadrones, oficiales y soldados de Guayaquil, Cuenca,
Lima y Pasto. FIN.
Señoras y Señores
Juan Francisco Morales
Suárez
[1] A los ejércitos españoles o
realistas que vinieron desde el sur se los conocía como las tropas de Lima,
pero se hallaban compuestas como vemos de soldados guayaquileños, peruanos y
cuencanos. Ver
documento irrefragable contenido en apartado No. 20 de “Documentos de la
Investigación”.
[2] Oviedo Zambrano, Armando,
“Ipiales: Historia, Cultura, Arte, Ed. Antonia Josefina Obando, 1ra. Ed. Junio
2005, Cedigraf, Ipiales,Col. Pág. 202 y 203.
[3] Consta su hoja de vida en el
Archivo Biblioteca de la Función Legislativa. Expondremos su vida de modo
ampliado.
[6] Su hermano don Domingo
Campe, aparece como comandante de las Milicias de Guayaquil con sueldo de Santa
Fé de Bogotá el día 10 de enero de 1815 en la Revista general de Comisario del
Ejército Real en la ciudad de Pasto, junto a don Manuel Ramírez y don José
Jaramillo, oficiales d la misma compañía militar.
[7]
También en la enciclopedia de historia colonial del escritor guayaquileño Ezio
Garay Arellano, encontramos a muchos de los linajes y nombres que constan en estos documentos. Hemos de
considerar que los sujetos que aquí están nombrados, son aquellos para quienes
se pide ascensos por méritos de guerra en el año 1812. Para los españoles y sus
aliados, que se hallaban abocados a una posible o inminente pérdida del
usufructo económico de las colonias, los méritos consistían entre otros hechos,
en los actos más sanguinarios en contra de la población civil. Así ocurrió
cuando gran parte de estas mismas tropas actuaron en Quito en 1810, en la
masacre en contra de niños, mujeres y ancianos, del 2 de agosto de ese año,
producto de cuyo “mérito” fueron ascendidos casi todos los miembros de las
fuerzas colonialistas. Su Jefe y muchos oficiales, así como el grueso de las
tropas, fueron recibidos por ciertos sectores de la élite del Puerto, pues
enseguida, este director del asalto, Arredondo, emparentó con esa clase social,
al casarse -con el encomio propio de sus amplios nexos familiares- con Ignacia
Noboa, hermana del futuro Presidente Diego de Noboa. Por tanto, cierta élite
económica -no la ciudad- que a la par de conformar, financiar y mantener a los
ejércitos realistas, aparece hoy como gestora de la libertad del Ecuador, tuvo
directa responsabilidad en el así llamado –genocidio- por el Dr. Jorge Salvador
Lara, del 2 de agosto de 1810 y en el objetivo etnocidio perpetrado por sus
ejércitos, en la Provincia de los Pastos, entre 1812 y 1814. La barbarie de la
guerra a muerte en América, se inició por tanto, en gran parte por su causa,
que la convirtió además, en exclusiva beneficiaria nacional de ese exterminio,
al perpetuar indefinidamente las relaciones de servidumbre en la República del
Ecuador, (la más excluyente y desigual de América hasta hoy), pues la supresión
de la mejor élite intelectual y moral quizá de América, el 2 de agosto, impide
hasta hoy un contrapeso ideológico, doctrinario y filosófico en nuestro Estado.
La primera libertad -de octubre de 1820- proclamada por quienes hasta poco
antes, defendían a ultranza el sistema colonial, en nada cambió la estructura
de la sociedad, así como la segunda, la denominada “revolución liberal” de
1895, en que el reacomodo de la misma élite, -repito no la ciudad- le permitió
continuar hasta hoy con la exclusión colonial, (racial, económica y social) en
su propia ciudad y en el País.
[8] Oficio del Crnel. Sebastián de
la Calzada, Paso de Flandes, 12 de agosto de 1819, dirigido al Presidente
Toribio Montes, en el cual se establece que la reorganización del ejército Real
batido en Boyacá, se realizará en las ciudades de Pasto y Popayán. Archivo de
Indias, Fondo Cuba, No. 744, reproducido en “Los Ejércitos del Rey”, pág. 443.
[9] Desde 1809 estuvo en
territorio de la Presidencia de Quito. Aparece en innúmeros documentos. Fue con Fominaya, uno de los
comandantes realistas en la Batalla de Camino Real.
[10] También hubo compañías de
Guaranda y Loja, y varios manabitas, entre los Ejércitos del Rey, casi
insignificantes, por su número.